Entrevista a Carmen Hernández, última licencia de MAR Real Estate en Madrid
María del Carmen Hernández Espada tiene una dilatada experiencia en el sector inmobiliario. Desde que terminara su licenciatura se ha dedicado a la gestión de la promoción en la empresa familiar. Tras más de veinte años ofreciendo este servicio en Mérida, ha decidido dar el salto a Madrid y de la mano de MAR Real Estate, reencontrarse con la figura del agente promotor, especializado en satisfacer necesidades de personas o colectivos muy concretos.
¿Puedes hablarnos de tu trayectoria profesional? ¿De dónde vienes, hacia dónde te diriges?
Me licencié en derecho e hice un Máster en Asesoría Jurídica en Empresa. Cuando terminé mis estudios me uní a la empresa familiar, la promotora constructora Jesús Hernández, con la que hemos cerrado más de una veintena de operaciones y casi 400 viviendas vendidas.
Mi labor era gestionar todo el proceso de la promoción, desde que se realizaba la compra del solar hasta que se entregaban las viviendas. Además me encargaba de la gestión documental, así como la relación con los clientes. Por otro lado, también me hacía cargo de la gestión patrimonial de los inmuebles propios.
En cuanto a construcción, hay obras de relevancia como son los concesionarios Audi y Volkswagen, y la más emblemática y de mayor complejidad es la fábrica de Carcesa en Mérida, obra en la que el equipo técnico tuvo un grandísimo mérito.
Si tuviera que resaltar algo después de todos estos años en el sector sería la satisfacción plena de la mayoría de mis clientes, la mayoría de los cuales siguen teniendo relación con nosotros.
¿Por qué MAR Real Estate? ¿Habías barajado otras posibilidades antes?
Siempre se barajan muchas posibilidades pero mientras estábamos en la vorágine del boom inmobiliario no teníamos tiempo de nada que no fuera sacar adelante nuestro trabajo. Sin embargo, el rumbo cambió al empezar la crisis, momento en el que nuestra máxima preocupación era gestionar la actividad de la empresa como podíamos y sobrevivir.
Habiendo superado lo peor, llega un momento en el que hay que darle un vuelco a todo esto y decido comenzar una nueva andadura en Madrid, ciudad que siempre me ha gustado y en la que creo que hay grandes posibilidades.
Aquí es donde llega MAR Real Estate.
Conocí a IPE (Instituto de Práctica Empresarial) hace muchos años, cuando hice el máster de urbanismo con ellos, y siempre he tenido contacto y noticias a lo largo de los años. Tanto es así que me decidí a hacer el curso de Dirección de Agencias Inmobiliarias y darle un giro a mi vida profesional.
Me gusta la filosofía de MAR Real Estate porque creo que es una forma de gestionar la actividad inmobiliaria muy buena, diferente a la tradicional y que, además, considero la más acertada en la realidad actual. En este sentido es donde creo que podemos desarrollarnos profesionalmente. Hay que innovar y hacer cosas nuevas.
¿Qué líneas estratégicas vas a desarrollar desde MAR Real Estate?
Seguiré con la promoción porque es en lo que tengo experiencia. Para ello contactaremos con empresarios, profesionales, inversores, etc., con los que desarrollar una promoción. A partir de ahí, agrupar a todos los agentes intervinientes: organismos oficiales, técnicos, constructores, clientes con posibilidad de compra…
En definitiva, la elaboración de proyectos de forma integral y sobre todo, más en contacto con los clientes, trabajando para ellos, su rentabilidad y su felicidad, como fin último.
¿Qué beneficios esperas alcanzar en el corto, medio y largo plazo?
Mi lugar ahora es Madrid con MAR Real Estate.
La promoción es mi objetivo a corto y medio plazo, compatibilizándolo con la gestión patrimonial de clientes. Insisto, promociones muy ajustadas al perfil y necesidades de cada cliente, colectivo, etc.
MAR Real Estate lo forman las oficinas y sus miembros, ¿qué puedes aportar a esta red multidisciplinar?
Principalmente mi experiencia y el saber coordinar, de manera armónica, todo el proceso de una promoción. La clave es generar confianza entre los diferentes agentes que intervienen en el proceso, algo muy en concordancia con la filosofía de MAR Real Estate y a través de la figura del agente promotor residencial APR (Agente Promotor Residencial).