Consejos para una decoración de estilo rústico actual
En las grandes ciudades de todo el mundo es cada vez más popular la decoración de estilo rústico… pero actual. Un estilo que se caracteriza por la naturalidad, la elegancia informal, el confort y la calidez hogareña, y que año a año va ganando cada vez más adeptos.
Ya sea con un rústico “nórdico” o de campiña pura y dura, las casas de estilo rústico moderno persiguen el mismo objetivo con los mismos materiales: con la piedra y la madera por bandera.
En definitiva, la búsqueda mediante la decoración de la sensación de calidez, armonía y confort, con una belleza natural que sobresalga de la propia ornamentación. Os dejamos con algunos trucos, consejos y tendencias para que conozcáis con mayor detalle el mundo de la decoración rústica moderna.
5 claves para una decoración rústica moderna
El estilo rústico está en tu ADN si cuando visualizas tu casa perfecta las vigas, la madera, la piedra y lo natural son los protagonistas. Por ello, es importante conocer algunas de las claves para la decoración de interiores rústicos modernos.
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- La simbiosis de materiales y colores, con el bosque y el campo siempre como fuente de inspiración. Paredes en piedra, lámparas de estilo industrial, alfombras, cestas…
- Las piezas antiguas vuelven a cobrar vida. Un bonito cabecero con décadas de historia, puertas y herrajes antiguos, la consola de nuestros abuelos o piezas artesanales y de oficio, pueden ser muy útiles y eficaces. ¡Recicla!
- Sin duda, otra de las tendencias más actuales para este estilo son las baldosas clásicas.
- Inunda tu hogar de linos, fibras, plantas y flores.
- Exhibe los materiales y los muebles al natural, compensando lo robusto y oscuro con lo claro y sencillo.
En definitiva, hablar de estilo rústico es hacerlo de un hogar que logre ser confortable, ameno, acogedor y casual.
Cómo incluir la decoración estilo rústico moderno en casa
La fina línea que separa el old fashioned y la decoración rústica moderna que queremos conseguir tiene unas pautas, unas características y un manual de estilo que no podemos pasar por alto.
La madera es la gran protagonista, ya sea en el suelo, en los muebles, en las puertas o en el techo. Está en todas partes y no hay que disimular su presencia. Al fin y al cabo, el estilo rústico toma los materiales de la naturaleza, como la madera, las piedras, el mimbre o los metales, y los traslada al hogar. Lo que sí se estila es la combinación de muebles, objetos o vigas de madera oscura con otros más claros.
La madera blanqueada también es otro factor que ayuda a lograr una notable decoración de salón rústico. De hecho, el blanco es la base y una de las grandes claves para lograr mayor luminosidad y calidez en las estancias.
No obstante, la paleta cromática del estilo rústico moderno también está inspirada en los tonos piedra, marrones, beige y verdes o rojos que encontramos en la naturaleza. Tonos más vivos con una excepción: el gris, que está ganando cada vez más adeptos en los detalles de cocina y baño, los textiles y el sofá.
Las líneas sencillas y limpias son la evolución lógica de la ornamentación, los acabados trabajados y las patas labradas del diseño rústico clásico.
La decoración de cocinas rústicas
Las cocinas rústicas son ese estilo imperecedero que, por más que pasen los años, se sigue repitiendo y perfeccionando. Nunca pasa de moda.
Las de toda la vida, de pueblos, campos y sierra, han cogido un nuevo vuelo con las actuales, que aúnan tradición y modernidad.
Lo que busca es una estética de lo rural, del sentido del hogar, la calidez familiar, pero sin renunciar a la modernidad. Para ello, los electrodomésticos se compran adaptados y mimetizados con una decoración en la que, de nuevo, la madera es la estrella.
Para lograr la decoración de cocinas rústicas perfecta, los blancos y sus variantes, los tonos neutros y crudos y ciertas dosis de color son imprescindibles.
Los accesorios son un mundo aparte: los tiradores de los muebles en latón dorado, las cortinas de las ventanas, las lámparas de techo con luz tenue, el uso de cenefas y tonos marrones.
Las encimeras pasan de lo sintético a la piedra natural, con fregaderos de porcelana y el menaje que luzca.
Lo retro y lo vintage siempre le dan ese toque chic que ponga la guinda al pastel en tu cocina rústica ideal. Sin olvidarnos de bonitos botes de cristal, tarteras, fuentes para la fruta o el pan, etc.
En busca del salón rústico perfecto
Dentro de una casa de estilo rústico moderno, el gato al agua se lo suele llevar el comedor.
Lo principal que hay que saber es que las opciones son innumerables, y que es perfectamente posible lograr una decoración rústica barata y óptima para tu comedor.
En esta instancia, las telas, la piedra y la madera, mostrando sencillez, naturalidad y cierta rudeza, son elementos que no se negocian. Hay que dejar atrás la excesiva ornamentación, el plástico y lo artificial.
En las paredes, si el blanco no es suficiente para darles un toque campestre, los tonos beige o arena han de ser la elección.
Y con el mobiliario: prudencia.
Conjugar bien entre sí esos muebles rústicos, grandes y recios, no siempre es fácil. Es mejor partir de una gran pieza, como una mesa de comedor, y a partir de ahí ir añadiendo elementos. De nuevo, es más que interesante rescatar viejos muebles y darles una nueva vida con lija y pintura.
Finalmente, en cuanto a complementos y textiles, predominan las macetas de barro, los cojines estampados, el mimbre, candelabros o los relojes y espejos antiguos.